Comunicado 10/2016
Falso Sacerdote en la Arquidiócesis:
Rafael Lira Gutiérrez
A toda la Comunidad Diocesana:
Les saludo con afecto y deseo que vivan siempre unidos por la fe y la caridad.
Les comunico que ha llegado información a esta Curia Arzobispal sobre un presunto sacerdote de nombre Rafael Lira Gutiérrez, quien ofrece, inválidamente, la Sagrada Eucaristía y algunos sacramentales en nuestra Arquidiócesis de Guadalajara. Conforme a los datos obtenidos, este hombre dice haber recibido el orden sacerdotal el día 30 de noviembre de 1981 por el Sr. Obispo Marcel Lefebvre, y que en la actualidad se desempeña en la Congregación Religiosa de los Carmelitas Descalzos. Según la investigación, ni la Fraternidad de San Pedro, ni la Comunidad de los Carmelitas Descalzos, ni en el Arzobispado de Guadalajara se conoce al Sr. Rafael Lira Gutiérrez, ni se le ha concedido permiso para administrar los sacramentos en la Arquidiócesis.
La disciplina de la Iglesia declara irregular a “quien haya realizado un acto de potestad de orden reservado a los Obispos o a los presbíteros, sin haber recibido ese orden o estándole prohibido su ejercicio por una pena canónica declarada o impuesta” (Can. 1041 § 6).
Quiero insistir a los Párrocos, Rectores de Templos, Capellanes de Casas Religiosas y Agentes de pastoral, que sean muy precavidos para no dejarse engañar por esta clase de personas, a quienes deben denunciar ante la autoridad eclesiástica. Por eso, les recuerdo que no se permita a ninguna persona presidir la Eucaristía y los demás actos propios del Ministerio Ordenado, si no les consta plenamente que en verdad es un sacerdote en comunión con la Iglesia Católica, y que cuenta con sus debidas licencias ministeriales al día, las cuales son competencia exclusiva del Obispo del lugar al que se está incardinado. Si son sacerdotes de otras Diócesis preguntar el motivo y duración de su estancia en la circunscripción de Guadalajara; les recuerdo que pueden preguntar al Arzobispado, si subsiste alguna duda.
Que el Padre nos conceda la unidad por la que oró nuestro Señor la víspera antes de padecer: “Padre Santo, protege en tu nombre a los que me has dado, para que sean uno, con Tú y Yo somos uno” (Jn 17, 11), y así todos evitemos toda clase de divisiones y engaños.
Guadalajara, Jal., a 7 de marzo de 2016.
Jesús García Zamora Pbro.
Vicario General
Javier Magdaleno Cueva Pbro.
Secretario Canciller
Prot. A813/2016