9 jueves
Morado
FERIA DE CUARESMA
o SANTA FRANCISCA ROMANA, Religiosa
MR p. 213 y 689 [225 y 705] / Lecc. I p. 728
Francisca Ponziani (1384-1440) nació en Roma. Fue modelo de
esposa y madre entregada a la educación de sus hijos. Dedicaba
largos ratos a la oración y al servicio de los pobres. Muerto su
marido, reunió bajo la Regla de san Benito a un grupo de mujeres
deseosas de consagrarse a Dios.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 138, 23-24
Examíname, Dios mío, y conoce mi corazón; mira si voy por
mal camino y condúceme por la senda de la salvación.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que nos diste en santa Francisca Romana un
singular modelo de vida matrimonial y monastica, ensénanos
a servirte con perseverancia, para que podamos reconocerte y
seguirte en todas las circunstancias de la vida. Por nuestro Senor
Jesucristo, tu Hij o, que vive y reina contigo en la unidad del
Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[Maldito el que confía en el hombre; bendito el que confía en el
Señor.]
Del libro del profeta Jeremías 17, 5-10
Esto dice el Señor: “Maldito el hombre que confía en el hombre,
que en él pone su fuerza y aparta del Señor su corazón. Será como
un cardo en la estepa, que no disfruta del agua cuando llueve;
vivirá en la aridez del desierto, en una tierra salobre e inhabitable.
Bendito el hombre que confía en el Señor y en él pone su
esperanza. Será como un árbol plantado junto al agua, que hunde
en la corriente sus raíces; cuando llegue el calor, no lo sentirá y
sus hojas se conservarán siempre verdes; en año de sequía no se
marchitará ni dejará de dar frutos.
El corazón del hombre es la cosa más traicionera y difícil de
curar. ¿Quién lo podrá entender? Yo, el Señor, sondeo la mente y
penetro el corazón, para dar a cada uno según sus acciones, según
el fruto de sus obras”. Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 1, 1-2. 3. 4 y 6
R. Dichoso el hombre que confía en el Señor.
Dichoso aquel que no se guía por mundanos criterios, que no
anda en malos pasos ni se burla del bueno, que ama la ley de Dios
y se goza en cumplir sus mandamientos. R.
Es como un árbol plantado junto al río, que da fruto a su tiempo
y nunca se marchita. En todo tendrá éxito. R.
En cambio los malvados serán como la paja barrida por el
viento. Porque el Señor protege el camino del justo y al malo sus
caminos acaban por perderlo. R
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 8, 15
R. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.
Dichosos los que cumplen la palabra del Señor con un corazón
bueno y sincero, y perseveran hasta dar fruto. R. Honor y gloria
a ti, Señor Jesús.
EVANGELIO
[Recibiste bienes en tu vida y Lázaro, males; ahora él goza del
consuelo, mientras que tú sufres tormentos.]
Del santo Evangelio según san Lucas 16, 19-31
En aquel tiempo, Jesús dijo a los fariseos: “Había un hombre
rico, que se vestía de púrpura y telas finas y banqueteaba
espléndidamente cada día. Y un mendigo, llamado Lázaro, yacía a
la entrada de su casa, cubierto de llagas y ansiando llenarse con las
sobras que caían de la mesa del rico. Y hasta los perros se acercaban
a lamerle las llagas.
Sucedió, pues, que murió el mendigo y los ángeles lo llevaron al
seno de Abraham. Murió también el rico y lo enterraron. Estaba éste
en el lugar de castigo, en medio de tormentos, cuando levantó los
ojos y vio a lo lejos a Abraham y a Lázaro junto a él.
Entonces gritó: ‘Padre Abraham, ten piedad de mí. Manda a
Lázaro que moje en agua la punta de su dedo y me refresque la
lengua, porque me torturan estas llamas’. Pero Abraham le contestó:
‘Hijo, recuerda que en tu en vida recibiste bienes y Lázaro, en
cambio, males. Por eso él goza ahora de consuelo, mientras que
tú sufres tormentos. Además, entre ustedes y nosotros se abre un
abismo inmenso, que nadie puede cruzar, ni hacia allá ni hacia acá’.
El rico insistió: ‘Te ruego, entonces, padre Abraham, que
mandes a Lázaro a mi casa, pues me quedan allá cinco hermanos,
para que les advierta y no acaben también ellos en este lugar de
tormentos’. Abraham le dijo: ‘Tienen a Moisés y a los profetas;
que los escuchen’. Pero el rico replicó: ‘No, padre Abraham. Si
un muerto va a decírselo, entonces sí se arrepentirán’. Abraham
repuso: ‘Si no escuchan a Moisés y a los profetas, no harán caso,
ni aunque resucite un muerto’”. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN: San Lucas –que, como bien lo
sabemos, gusta de insistir en el tema de la «pobreza»
(Cfr. Lc 6, 30; 18, 22; 21, 4)– nos la presenta ahora como
medio revelador de las “realidades últimas”. Riqueza y
orgullo fácilmente tienden a endurecernos el corazón.
Algo que constatamos aquí en quien «banqueteaba
espléndidamente cada día», negándole incluso las
migajas al mendigo que muere de hambre a su puerta.
Demasiado tarde se dará cuenta de haber sido víctima
de su refinado egoísmo y de haberse desentendido
culpablemente del hermano.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Por el presente sacrificio, santifica, Señor, nuestro esfuerzo,
para que mediante el testimonio externo de nuestras prácticas
cuaresmales, obtengamos interiormente su fruto. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Sal 118, 1
Dichosos los que, con vida intachable, caminan haciendo la
voluntad del Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Que este sacramento, Señor Dios, continúe actuando en
nosotros, y su acción sea cada vez más vigorosa. Por Jesucristo,
nuestro Señor.
ORACIÓN SOBRE EL PUEBLO
Ayuda, Señor, a tus siervos, que imploran el auxilio de tu gracia,
para que obtengan el amparo de tu protección y de tu guía. Por
Jesucristo, nuestro Señor.
ACTIVIDAD DIOCESANA
Jubileo circular: Jueves 9, Viernes 10 y Sábado 11:
Ntra. Sra. de las Rosas, La Medalla Milagrosa, Ntra.
Sra. del Buen Camino, Ntra. Sra. de Altamira, San
Pascual Bailón (Miravalle), La Visitación (Polanco),
La Purísima Concepción (Mpio. de Zapotlanejo),
Señor San José (La Estanzuela).