15 viernes
Morado
FERIA
MR p. 141 [157] / Lecc. I p. 383
ANTÍFONA DE ENTRADA
El Señor vendrá con esplendor a visitar a su pueblo, para
traerle la paz y la vida eterna.
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Dios todopoderoso, que concedas a tu pueblo
esperar en constante vigilancia la venida de tu Unigénito, para
que, conforme a lo que nos enseñó el autor mismo de nuestra
salvación, podamos correr presurosos a su encuentro con
nuestras lámparas encendidas. Él, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[¡Ojalá hubieras obedecido mis mandatos!]
Del libro del profeta Isaías 48, 17-19
Esto dice el Señor, tu redentor, el Dios de Israel:
"Yo soy el Señor, tu Dios, el que te instruye en lo que es
provechoso, el que te guía por el camino que debes seguir.
¡Ojalá hubieras obedecido mis mandatos! Sería tu paz como un
río y tu justicia, como las olas del mar.
Tu descendencia sería como la arena y como granos de arena,
los frutos de tus entrañas. Nunca tu nombre hubiera sido borrado
ni arrancado de mi presencia". Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 1, 1-2. 3. 4 y 6
R. Dichoso el hombre que confía en el Señor.
Dichoso aquel que no se guía por mundanos criterios, que
no anda en malos pasos ni se burla del bueno, que ama la ley de
Dios y se goza en cumplir sus mandamientos. R.
Es como un árbol plantado junto al río, que da fruto a su
tiempo y nunca se marchita. En todo tendrá éxito. R.
En cambio los malvados serán como la paja barrida por el
viento. Porque el Señor protege el camino del justo y al malo
sus caminos acaban por perderlo. R.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
R. Aleluya, aleluya.
Ya viene el Señor, salgamos a su encuentro; él es el príncipe
de la paz. R. Aleluya.
EVANGELIO
[No escuchan ni a Juan ni al Hijo del hombre.]
Del santo Evangelio según san Mateo 11, 16-19
En aquel tiempo, Jesús dijo: "¿Con qué podré comparar a
esta gente? Es semejante a los niños que se sientan en las
plazas y se vuelven a sus compañeros para gritarles: 'Tocamos la
flauta y no han bailado; cantamos canciones tristes y no han
llorado'.
Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dijeron: 'Tiene un
demonio'. Viene el Hijo del hombre, y dicen: 'Ese es un glotón y
un borracho, amigo de publicanos y gente de mal vivir'. Pero la
sabiduría de Dios se justifica a sí misma por sus obras". Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN: La parábola de los niños caprichosos
e inestables que juegan en la plaza deja en evidencia
que los judíos del tiempo de Jesús –al no comprender
al austero Juan el Bautista– tampoco podían
entenderlo a Él, el «amigo de publicanos y pecadores»
(Lc 7, 34). Efectivamente, ni el rígido ascetismo de
Juan ni la benévola y humana condescendencia de
Jesús logran cambiar su corazón. Más decisivas
fueron sus pretenciosas “razones” y sus empecinados
“pretextos” los que, finalmente, los mantendrán
atrapados en su lamentable forma de ser y de actuar.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que te sean agradables, Señor, nuestras humildes súplicas
y ofrendas, y puesto que no tenemos merecimientos en qué
apoyarnos, socórranos el poderoso auxilio de tu benevolencia.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Flp 3, 20-21
Esperamos como salvador a Jesucristo, el Señor; él
transformará nuestro cuerpo frágil en cuerpo glorioso como el
suyo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Saciados por el alimento que nutre nuestro espíritu, te
rogamos, Señor, que, por nuestra participación en estos misterios,
nos enseñes a valorar sabiamente las cosas de la tierra y a poner
nuestro corazón en las del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.