19 viernes
Verde / Blanco
Feria
o BEATA MARÍA VICENTA DE SANTA
DOROTEA CHÁVEZ OROZCO, Virgen*
MR p. 927 [966] / Lecc. II p. 577
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 104, 3-4
Alégrese el corazón de los que buscan al Señor; busquen al
Señor y serán fortalecidos, busquen siempre su rostro.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que llamaste a la beata María Vicenta de Santa
Dorotea Chávez Orozco a buscar tu reino en este mundo con la
práctica de la caridad perfecta, concede que, fortalecidos por
su intercesión, avancemos con ánimo alegre por el camino del
amor. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos
de los siglos.
PRIMERA LECTURA
[He escuchado tu oración y he visto tus lágrimas.]
Del libro del profeta Isaías 38, 1-6. 21-22. 7-8
En aquel tiempo, el rey Ezequías enfermó de muerte y vino
a verlo el profeta Isaías, hijo de Amos, y le dijo: "Esto dice el
Señor: 'Arregla todos tus asuntos, porque no te vas a aliviar y te
vas a morir' ".
Ezequías volvió la cara hacia la pared, oró al Señor y dijo:
"Acuérdate, Señor, de que te he servido con fidelidad y rectitud
de corazón y de que he hecho siempre lo que a ti te agrada". Y
lloró con abundantes lágrimas.
Entonces el Señor le habló a Isaías y le dijo: "Ve a decirle
a Ezequías: 'Esto dice el Señor, Dios de tu padre, David: He
escuchado tu oración y he visto tus lágrimas. Voy a curarte y en
tres días podrás ir al templo del Señor. Voy a darte quince años
más de vida. Te libraré de la mano del rey de Asiría a ti y a tu
ciudad, y protegeré a Jerusalén' ".
Dijo entonces Isaías: "Traigan un emplasto de higos y
aplíquenselo en la llaga para que se alivie". Y Ezequías dijo:
"¿Cuál es la señal de que podré ir al templo del Señor?"
Respondió Isaías: "Esta será para ti la señal de que el Señor
cumplirá las cosas que te ha dicho: voy a hacer que la sombra
retroceda los diez grados que ha avanzado en el reloj de sol de
Ajaz". Y el sol retrocedió los diez grados que había avanzado.
Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL Is 38, 10. 11. 12abcd. 16
R. Sálvame, Señor, y viviré.
Yo pensaba que a la mitad de mi vida tendría que dirigirme
hacia las puertas del abismo y me privarían del resto de mis
años. R.
Yo pensaba que ya no volvería a ver al Señor en la tierra
de los vivos, que ya no volvería a ver a los hombres entre los
habitantes del mundo. R.
Levantan y enrollan mi vida como una tienda de pastores.
Como un tejedor tejía yo mi vida, y me cortaron la trama. R.
A los que Dios protege viven, y entre ellos vivirá mi espíritu;
me has curado, me has hecho revivir. R.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 10, 27
R. Aleluya, aleluya.
Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y
ellas me siguen. R. Aleluya.
EVANGELIO
[El Hijo del hombre también es dueño del sábado.]
Del santo Evangelio según san Mateo 12, 1-8
Un sábado, atravesaba Jesús por los sembrados. Los
discípulos, que iban con él, tenían hambre y se pusieron a
arrancar espigas y a comerse los granos. Cuando los fariseos los
vieron, le dijeron a Jesús: "Tus discípulos están haciendo algo
que no está permitido hacer en sábado".
Él les contestó: "¿No han leído ustedes lo que hizo David
una vez que sintieron hambre él y sus compañeros? ¿No
recuerdan cómo entraron en la casa de Dios y comieron los
panes consagrados, de los cuales ni él ni sus compañeros podían
comer, sino tan sólo los sacerdotes?
¿Tampoco han leído en la ley que los sacerdotes violan
el sábado porque ofician en el templo y no por eso cometen
pecado? Pues yo digo que aquí hay alguien más grande que el
templo.
Si ustedes comprendieran el sentido de las palabras:
Misericordia quiero y no sacrificios, no condenarían a quienes
no tienen ninguna culpa. Por lo demás, el Hijo del hombre
también es dueño del sábado". Palabra del Señor.
REFLEXIÓN: En esta controversia, a propósito
de las espigas arrancadas «en sábado» por sus
hambrientos discípulos, Jesús los defiende
valiéndose de dos ejemplos. El de David y sus
hombres que –mientras huían de Saúl– comieron
los panes benditos, reservados a los sacerdotes. Y,
en seguida, con el comportamiento de los mismos
sacerdotes que pueden «violar» el sábado al servicio
del templo sin incurrir en transgresión. A esto
suma una reflexión acerca de la superioridad de la
misericordia frente a un ritualismo estéril, y remata
con una afirmación que remite a su propia condición
mesiánica como «Señor del sábado».
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta, Señor, las ofrendas de nuestro servicio, que
presentamos en tu altar en la conmemoración de la beata María
Vicenta de Santa Dorotea Chávez Orozco, y concédenos que,
libres de las ataduras de este mundo, seas tú nuestra única
riqueza. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5, 3
Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino
de los cielos.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Te rogamos, Dios todopoderoso, que fortalecidos con este
sacramento, aprendamos, a ejemplo de la beata María Vicenta
de Santa Dorotea Chávez Orozco, a buscarte siempre sobre
todas las cosas, y demos, ante el mundo, una imagen auténtica
del hombre nuevo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
* BEATA MARÍA VICENTA
DE SANTA DOROTEA CHÁVEZ OROZCO
La Beata María Vicenta de Santa Dorotea Chávez
Orozco, nació el 6 de febrero de 1867 en Cotija,
Mich., y murió santamente el 19 de julio de1949 en
Guadalajara, México. Crece en el seno de una humilde
y cristiana familia. Desde pequeña tiene una notable
devoción al Niño Jesús y solía invitar a sus amigos a
unirse con ella en la oración. Cuando tenías 25 años
se enfermó gravemente y tuvieron que internarla en
el pequeño hospital de la Parroquia de Mexicaltzingo,
bajo el cuidado de las Damas de la Conferencia
de San Vicente de Paúl. Esta experiencia de dolor
y la dedicación con la cual se ocuparon de ella, le
hicieron comprender cuál era su camino: habría de
dedicarse a Dios y al cuidado de sus hermanos. Por
eso, una vez restablecida su salud, decidió volver
al hospital, esta vez, para ocuparse ella misma de
los enfermos. Poco después, se consagró al Señor
y, desde entonces, le empezaron a llamar “la Madre
Vicentita”.
Con el lema de San Paolo «la caridad de Cristo nos
anima», funda la Congregación de las Siervas de la
Santísima Trinidad y de los pobres. El servicio a sus
hermanos era para ella un modo muy concreto de
glorificar a Dios. Su vida se convirtió en un ejemplo
de celo apostólico, paciencia y tierna compasión por
los más necesitados. Nombrada superiora general
de la congregación, desempeñó esta tarea por
treinta años con amabilidad y dulzura. Dificultades
y contratiempos fueron modelando su carácter
enérgico. Sufrió la persecución religiosa que estalló
en México en 1926 pero ella, a escondidas, continuó
su labor de ayuda a los necesitados, hasta el día
en que, víctima de un ataque cardiaco, concluyó su
vida terrena para unirte definitivamente al Señor.
El 9 de noviembre de 1997 el Papa Juan Pablo II la
proclamó Beata en la Plaza de San Pedro en Roma.
http://es.radiovaticana.va/santoral/269.asp