Toma de posesión de monseñor Eduardo Muñoz Ochoa como séptimo obispo de la diócesis de Autlán

Pbro. Eduardo Vázquez Rodríguez[1]

Jueves 4 de abril de 2024

Hoy la Iglesia de Autlán, Jalisco, recibió a su nuevo obispo, monseñor Eduardo Muñoz Ochoa. Muy de mañana salió de Guadalajara la comitiva que acompañó al nuevo obispo de Autlán, entre ellos el nuncio apostólico de nuestro país monseñor Joseph Spiteri y el arzobispo de Guadalajara, el cardenal José Francisco Robles Ortega.

Esta comitiva tuvo una parada en la comunidad de Quililla, municipio de Tecolotlán, primera comunidad de la diócesis de Autlán por la que pasaron, ahí se bajaron de su vehículo y monseñor Eduardo tuvo el primer contacto con los fieles de la su nueva diócesis; fue recibido por el señor cura José Luis López, párroco de  Ayotitlán, a donde pertenece la comunidad de Quililla, y por el señor cura  Rodrigo Vázquez García, decano de la zona. En esta pequeña pero significativa bienvenida, monseñor Eduardo pudo dar un pequeño mensaje a los fieles, saludarlos y bendecirlos.

La comitiva se detuvo de nuevo en Juchitlán, donde se les ofreció el desayuno por parte del señor cura Francisco Ortiz, párroco de este lugar, y de su vicario el padre Seth Ibarra. Después continuaron su camino rumbo a la ciudad de Autlán.

La celebración se realizó en el Seminario Diocesano. En la sacristía de la capilla, monseñor Eduardo hizo su profesión y juramento de fidelidad ante el nuncio, el arzobispo de Guadalajara y el emérito de Autlán, monseñor Rafael Sandoval.

Posteriormente comenzó la concelebración eucarística, a las 11:00 horas, presidida por el cardenal Robles. El vicario general de la diócesis de Autlán, el presbítero Francisco Méndez, dio la bienvenida a los 26 obispos participantes en la ceremonia. El emérito de Autlán también dirigió un mensaje de agradecimiento y despedida; dijo al nuevo obispo: “llegas a una diócesis bella en su costa, bella en sus montañas, bajíos y sierras, pero sobre todo en la belleza de sus  personas y reafirmo que también usted es una gracia para ellos, y termino diciendo que en las personas sencillas le hablara Dios”.

El secretario canciller de Autlán leyó las letras apostólicas con las que el papa Francisco nombraba al nuevo obispo de la diócesis de Autlán, quien mostró su nombramiento a al colegio de consultores, a los sacerdotes, religiosas y laicos presentes en la celebración. El arzobispo de Guadalajara entregó el báculo a monseñor Eduardo, quien ocupó la sede y continuó presidiendo la celebración.

El nuncio apostólico pronunció la homilía, en la que señaló que Dios le dio un hermoso regalo a la diócesis de Autlán en esta pascua, la llegada de su nuevo obispo, y pidió a los fieles que lo apoyen en esta nueva encomienda.

Antes de finalizar la misa, monseñor Eduardo dirigió unas palabras a su nueva grey, citando a san Agustín: “con ustedes son cristiano y para ustedes obispo”; también señaló que el episcopado es tanto un don como un peso, pues debe estar al pendiente del caminar de un pueblo. También citó a san Ignacio de Antioquía: “con el obispo todo, sin el obispo nada”, en alusión a la sinodalidad de la Iglesia. Y por último invitó a todos a caminar juntos para construir el Reino de Dios y pidió a los sacerdotes colaborar con él.

También recibió un saludo de bienvenida el presidente interino de Autlán, Dagoberto Trujillo,  quien a nombre de la ciudad lo acoge no como visitante, sino como un autlense más, y le entregó las llaves de la ciudad como muestra de bienvenida.

Terminada la celebración se tuvo una rueda de prensa en la cual el nuevo obispo dio sus impresiones sobre su llegada y bienvenida a Autlán. Posteriormente todos pasaron al banquete en el salón multiusos del Seminario.

Por la tarde el nuevo obispo fue a la catedral, y la recibió según el rito establecido. Dios bendiga esta nueva etapa en el caminar de la diócesis de Autlán.