Circulares

CIRCULAR 2/2024

Fallecimiento del señor presbítero don Ramón Díaz Navarro (1958-2023)

A toda la comunidad diocesana:

Les saludo fraternalmente y les deseo la paz de Jesucristo.

Les comunico sobre el fallecimiento del señor presbítero don Ramón Díaz Navarro, quien ha participado del ministerio de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote. Nosotros ahora mantenemos la esperanza, como lo expresa la Sagrada Escritura: “Dichosos los que mueren en el Señor… Que descansen ya de sus fatigas, pues sus obras los acompañan” (cf. Ap. 14, 13).

El señor presbítero don Ramón Díaz Navarro nació en Ameca, Jalisco, el 17 de junio de 1958. Recibió la ordenación sacerdotal el 20 de mayo de 1989. Desempeñó su ministerio como vicario cooperador de Guadalupe, en Chapalita (22 de julio de 1989). El 21 de julio de 1990 fue llamado a servir como promotor vocacional del Seminario Diocesano. Fue capellán del Hospital Pedro Loza (21 de septiembre de 1990), capellán del Colegio República Mexicana (21 de septiembre de 1998); y nuevamente capellán del Hospital Pedro Loza, desde el 4 de enero de 1999, por espacio de tres años. Fue coordinador de la Comisión Nacional de Pastoral Vocacional (11 de enero de 1999). Durante una década sirvió como párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, en Tlaquepaque (22 de febrero de 2002). Fue asesor del Programa de Casos Emergentes de Cáritas (5 de septiembre de 2003), representante ante el Consejo Presbiteral del Decanato de San Pedro (8 de diciembre de 2003) y decano de San Pedro (1º de enero de 2008). Fue nombrado cuasi párroco de Nuestra Señora de la Salud de los Enfermos (30 de marzo de 2012) y vicario parroquial de San Lorenzo Mártir (7 de septiembre de 2012). A pesar de su enfermedad, que empeoró durante los últimos años, desempeñó su ministerio en la parroquia de San José en Ameca, Jalisco, desde el mes de diciembre de 2023. El día 31 de este propio mes, llama el Señor al padre Ramón a su presencia, a la edad de 65 años y 34 años de ministerio sacerdotal.

El padre Ramón fue un sacerdote piadoso e inteligente, equilibrado, organizador, eficiente y cumplido con sus deberes pastorales, con iniciativa y creatividad. Fue un pastor magnánimo, generoso y cercano a los fieles. Se recordará su gran labor, a nivel diocesano y nacional, en favor de la organización de la estructura de la promoción vocacional.

Que Jesucristo, Rey de Misericordia, haga recrearse en la contemplación eterna del Amor Verdadero a nuestro hermano Ramón Díaz Navarro, presbítero, para que, unido a los santos en el cielo, alabe por siempre al Cordero inmolado por nuestra salvación. Les invito, hermanos sacerdotes, a ofrecer sus intenciones de misa, y a las comunidades religiosas y a todos los fieles elevar sus oraciones por nuestro hermano sacerdote.

Guadalajara, Jalisco, a 18 de enero del 2024

Pbro. Dr. Javier Magdaleno Cueva
Secretario Canciller

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