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Libro de Visita de Fray Antonio Alcalde, 1776

34ª parte

 

El obispo de Guadalajara cierra el periplo

de su primera y única visita pastoral

por la parte sur de su dilatadísima diócesis.[1]

 

Visita a la parroquia de Zapopan[2]

 

 [En la ciu--] –dad de Guadalajara a veinte y nueve de abril de mil setecientos setenta y siete años, Su Señoría Ilustrísima Reverendísima el señor Maestro don fray Antonio Alcalde, del Sagrado Orden de Predicadores, Obispo de Guadalajara, Nuevo Reino de la Galicia y de León, del Consejo de su Majestad, etcétera, mi señor; para efecto de visitar el Beneficio Curado del pueblo y Santuario de Nuestra Señora de Zapopan, habiendo mandado Su Señoría Ilustrísima con anticipación que se librase el correspondiente despacho, así a dicho Cura como al de San Cristóbal de la Barranca; hoy día de la fecha como a las siete y media de la mañana, salió Su Señoría Ilustrísima de dicha ciudad a forlón, acompañado de su confesor y un capellán, y llegó al pueblo de Nuestra Señora de Zapopan como a las nueve horas de la mañana, y en la puerta fue recibido por el bachiller don José Antonio Bravo de Gamboa, Cura Beneficiado de dicho pueblo, en la forma dispuesta por el Ritual Romano, y habiendo entrado en la Iglesia parroquial y hecho oración, dio la bendición al pueblo y luego se retiró a la pieza destinada para //[3] su hospedaje y habitación.

En el pueblo y Santuario de Nuestra Señora de Zapopan, en treinta días del mes de abril de mil setecientos setenta y siete años, Su Señoría Ilustrísima Reverendísima el señor Maestro don fray Antonio Alcalde del Sagrado Orden de Predicadores, Obispo de Guadalajara, Nuevo Reino de la Galicia y de León, provincias del Nayarit, California, Coahuila y Texas, del Consejo de su Majestad, etcétera, mi señor; habiendo llegado a este pueblo el día de ayer en prosecución de su actual y general visita, hoy día de la fecha, para proceder a la local de la Iglesia parroquial y Santuario, pasó Su Señoría Ilustrísima a ella acompañado del Cura Beneficiado, bachiller don José Antonio Bravo de Gamboa, y de sus Tenientes, Capellanes del Santuario, Alcaldes indios, Regidores y principales de este pueblo, y habiendo entrado y hecho oración, se revistió de medio pontifical y cele–//– bró[4] el Santo Sacrificio de la Misa, la cual acabada, en presencia de todos concurrentes, revestido con capa blanca visitó el Sagrario y depósito del Santísimo Sacramento, donde hay un vaso con formas, la custodia y el rural en que se administra a los enfermos de fuera de la cabecera, dio a adorar al pueblo a su Divina Majestad y lo volvió a depositar en el mismo Sagrario.

Visitó la lámpara que arde delante de dicho Sagrario y la halló ardiendo con aceite de olivos.

Visitó el altar mayor y todos los demás que hay en la Iglesia, con sus aras, retablos y demás sagrados paramentos y todos los halló Su Señoría Ilustrísima con la decencia debida y aseo correspondiente. Pasó al bautisterio y en él visitó la pila bautismal, concha de plata y las crismeras que se hallaron en una cajita de plata y todo se halló en conveniente forma. Lo cual ejecutado, dio Su Señoría Ilustrísima con capa negra la //[5] conmemoración de los fieles difuntos y responsos acostumbrados por todo el campo de la Iglesia, y habiendo concluido se retiró a la pieza de su hospedaje y habitación.

 

Personal del Cura Beneficiado [al margen]

Incontinenti, el expresado bachiller don José Antonio Bravo de Gamboa presentó el Real Título y providencia de su presentación al Beneficio Curado de este pueblo y su feligresía, la colación que en virtud de ella se le confirió y el título que se le despachó por lo tocante a la jurisdicción eclesiástica, todo lo cual se halló en conveniente forma, y mandó Su Señoría Ilustrísima se le devolviese al expresado Cura para su resguardo, a quien se le devolvió.

 

Libros parroquiales [al margen]

Presentó asimismo los libros parroquiales de su administración en que se asientan a los que se bautizan, casan y entierran en esa Iglesia parroquial, y reconocidas sus partidas por menor desde la última visita hasta la presente, proveyó Su Señoría Ilustrísima en cada uno los autos correspondientes, como tam–//[6]–bién en el libro de informaciones de indios de pueblo de esta jurisdicción. Presentó un tanto autorizado de los Aranceles común del Obispado, el de indios de pueblo que no dan tasación y el de roturas de tierra, con las declaraciones que sobre ellos hizo el Ilustrísimo Señor Parada, de buena memoria; y mandó Su Señoría Ilustrísima que el expresado Cura tenga a la mano una copia de los citados Aranceles, quedando la que ha presentado fijada en parte pública en la Iglesia parroquial, como ha estado, para que todos sus feligreses vean lo que deben de pagarle por sus obvenciones y no puedan argüir exceso en ellas.

Juntamente presentó un testimonio autorizado en debida forma de las Constituciones Sinodales de este Obispado; y asimismo el padrón de todos feligreses de que se compone este pueblo y los de su jurisdicción, que según parece se halla extendida en once pueblos, tres haciendas y __ ranchos, en que habitan __ personas de confesión y comunión, expresando no haber aún todavía acabado de cumplir con el //[7] precepto anual de Nuestra Santa Madre Iglesia, y haciendo mención en el propio padrón de las distancias en que se hallan los dichos pueblos y haciendas respecto de la cabecera; y mandó Su Señoría Ilustrísima que luego que acaben sus feligreses de cumplir con el precepto anual de confesión y comunión, lo certifique a su continuación, y quedándose con una copia de él, remita el original a la Secretaria de Cámara y Gobierno de Su Señoría Ilustrísima y lo mismo ejecute en lo de adelante en cada un año, como se previene y manda en la décima de las Constituciones Sinodales de este Obispado.

 

Pliegos matrimoniales [al margen]

Presentó igualmente los pliegos de informaciones matrimoniales de españoles, mestizos, mulatos, indios laboríos y demás castas; y reconocidos, mandó Su Señoría Ilustrísima que en lo de adelante en las declaraciones de los testigos se haga expresión individual del tiempo que ha que conocen a los pre–//–[8]tendientes, y siendo éstos viudos, expresen cómo les consta, si vieron morir a sus consortes y dónde, de manera que no dando a lo menos dos testigos fidedignos que hayan visto muerto al marido o la mujer de quien son viudos, no proceda a la celebración del matrimonio ínterin no se le haga constar la viudez con la partida de entierro; y que en los que no fueren vecinos de esta jurisdicción, aunque tengan de vecindad en ella cuatro o más años, una vez que conste por sus declaraciones que salieron de su patria en edad competente para contraer matrimonio u algún otro impedimento, libre requisitorio para que sean amonestados en las parroquias de su origen, y siendo éste en ajeno obispado, remita la información original a Su Señoría Ilustrísima o al señor Provisor y Vicario General para su aprobación y demás que sea conveniente.  

 

Fábrica [al margen]

Últimamente presentó el libro y cuentas de la fábrica espiritual de esta Iglesia parroquial que ha corrido a cargo del expresado Cura desde tres de //[9] agosto del año pasado de mil setecientos sesenta y uno hasta diez de enero del corriente año, en cuyo tiempo parece haber tenido de recibo en el último año veinte y cuatro pesos, y de gasto con inclusión de los alcances que ha hecho en los anteriores años, doscientos noventa y cuatro pesos, cinco y medio reales, por lo que resulta el alcance de doscientos setenta pesos, cinco y medio reales de que hace remisión y voluntaria donación a la fábrica; y por ella le dio Su Señoría Ilustrísima las gracias declarando por legítimo el alcance que queda relacionado, y encargando al referido Cura que solicite con la mayor exactitud posible el aumento del culto Divino poniendo razón individual de los legados existentes a favor de la Iglesia parroquial con expresión de las fincas sobre que se hallan impuestos, quiénes, con fecha, dónde y ante quiénes otorgaron las correspondientes escrituras, las cuales procure por todos los medios //[10] posibles, así para el cobro de sus respectivos réditos como para la mayor seguridad de sus principales, para que de este modo se consiga el beneficio y sufragio de las almas de los fundadores.

 

Cuentas del señor tesorero del Santuario de Nuestra Señora [al margen]

Visitó Su Señoría Ilustrísima el libro y cuentas del Santuario de la prodigiosa Imagen de María Santísima Nuestra Señora, que presentó el señor licenciado don Francisco Ignacio Henríquez del Castillo, canónigo de la Santa Iglesia Catedral de la ciudad de Guadalajara, como tesorero del referido Santuario, y reconocidas las que ha llevado desde veinte y dos de noviembre del año pasado de setecientos setenta y cinco, en que por fallecimiento del señor doctor don Manuel Colón de Larreategui, arcediano de la misma Santa Iglesia, entró en el citado empleo, consta que con inclusión de un mil noventa y cinco pesos, cuatro y medio reales, ha recibido la cantidad de un mil ochocientos pesos cinco reales, y gastado la de trescientos cincuenta y siete pesos, por lo que resulta el alcance de un mil cuatrocientos cuarenta y dos pesos siete reales contra el expresado señor tesorero y //[11] a favor de este Santuario. Y declarando Su Señoría Ilustrísima por legítimo el alcance referido, mandó que el expresado señor tesorero se haga cargo del citado alcance en la primera partida de sus cuentas, continuando en el seguro en que se halla, y que habiendo suficiente cantidad para imponer un principal de dos mil pesos o más, dé cuenta a Su Señoría Ilustrísima para que se pueda imponer en finca segura y suficiente a beneficio del expresado Santuario, estando a la mira de cuándo acaban de pagarse los réditos correspondientes del ramo de Aniversarios de la Santa Iglesia Catedral, de los arrendamientos de la casa que fue de don Lorenzo Aguiar, para el cobro de los que corresponden a este Santuario por el principal de cuatrocientos pesos impuestos sobre la misma casa, y juntamente se le encarga solicite el cobro del principal y réditos que dice hallarse sobre la casa de Gaspar, el herrero, //[12] para que de ese modo se pueda conseguir el mayor aumento de los cultos de la Santísima Señora.

 

[Cofradías]

·      Cofradía de Nuestra Señora de la Concepción del pueblo de Ocotán [al margen]

Visitó Su Señoría Ilustrísima el libro y cuentas de la cofradía de la Purísima Concepción del pueblo de Ocotán de esta feligresía, la cual tiene de fondos doscientas cincuenta y siete cabezas de ganado mayor con inclusión de herradero y dos bestias caballares.

·      Cofradía de Nuestra Señora de la Concepción fundada en el pueblo de Tesistlán [al margen]

Juntamente visitó el libro y cuentas de la cofradía de la Purísima Concepción de Nuestra Señora, fundada en la Iglesia y Hospital del pueblo de Tesistlán de esta jurisdicción, cuyos fondos son doscientas sesenta y siete cabezas de ganado mayor incluso el herradero, cuarenta yeguas y potrillos y veinte caballos mansos; y reconocidos los ajustes y liquidaciones que se han hecho en cada un año por el Vicario Juez Eclesiástico de este partido, que únicamente se ha reducido a la cuenta del ganado que ha manifestado el caporal o mayordomo, y entrega que de él hizo al nuevamente electo, los aprobó Su Señoría Ilustrísima, y mandó que en lo de adelante se asienten con toda individualidad y expresión las cuentas de recibo y gasto de cada año, haciéndose cargo del producto //[13] de los cueros y demás esquilmos del ganado, y remitiéndose en descargo al mayordomo lo que con arreglo a las comunicaciones de la misma cofradía gastare en las dos festividades que en cada un año deben celebrarse, en la curación y alivio de los pobres enfermos, y en la misa que debe celebrarse por cada uno de los cofrades difuntos, sin permitir que se venda, mate, cambie o enajene cabeza alguna sin su especial licencia in scriptis, para que de este modo se consiga el mayor aumento en los fondos de las citadas cofradías.

 

Cuentas de las limosnas para la reedificación de la Iglesia [al margen]

Visitó un cuaderno que presentó el bachiller don Manuel Curras, clérigo presbítero domiciliario de este Obispado y Capellán del Santuario de Nuestra Señora, en que aparece la cuenta que ha llevado de las limosnas que ha percibido para reedificación de la Iglesia en las ruinas que han causado los temblores, y reconocida por menor, parece haber entrado en su poder la cantidad de 8 052 pesos, 6 reales, de que da gastados diez mil trescientos cincuenta y //[14] nueve pesos, cinco y medio reales, por lo que excede el gasto al recibo en 2 306 pesos, 7 ½ reales, a favor del referido bachiller Curras. Y otro cuaderno en que ha asentado las limosnas que los demandantes le han entregado y ha contribuido la común devoción de los fieles para el culto de Nuestra Señora, desde once de febrero de setecientos setenta y dos hasta el presente mes y año, las cuales ascienden a la cantidad de 3 449 pesos, 6 ½ reales, de que da gastados en el honorario de los demandantes, estampas y novenas de Nuestra Señora 1 668 pesos, 4 reales, por lo que sobran al Santuario 1 781 pesos, 2 ½ reales. Y dando Su Señoría Ilustrísima las gracias al citado bachiller Curras por el esmero y actividad con que promueve la devoción y cultos de la Santísima Señora, mandó que por principio de sus siguientes cuentas se haga cargo de los 1 781 pesos, 2 ½ reales, que resultan en el segundo cuaderno a favor del Santuario; y en el primero ponga por principio de su data los 2 306 pesos, 7 ½ reales, que a su favor resultan de alcance en los gastos de reedificación, para que en las cuentas que diere en lo de adelante se le admitan en descargo. //[15]

 

Legados [al margen]

·      Visitó igualmente cuatro escrituras de los legados de esta Iglesia parroquial, y son el uno de 1 000 pesos de principal, que fundaron don José de Lambaren y Tadea de Mendoza, viuda de Juan García, para una misa el día de los Desposorios, cuyo principal se halla sobre la casa que fue de Cristóbal Galindo, maestro de barbero y vecino que fue de Guadalajara;

·      Otro de 1 000 pesos de principal, impuestos sobre la casa de doña Antonia Cortés y Monroy en el barrio de Jesús María de dicha ciudad, para una misa el día de la Purísima Concepción de Nuestra Señora, por el alma del señor don Gabriel de Navas, las de sus padres y demás de su obligación.

·      Otro de 1 000 pesos, impuestos sobre la casa que tiene don Francisco Pamplona en el barrio de Santa Mónica de la expresada ciudad, para una misa el día de Señor San José a favor de la alma del señor don Basilio Ramos Giménez, de que otorgó el dicho Pamplona la correspondiente obligación //[16] en veinte y dos de julio del año pasado de setecientos sesenta y ocho, ante don Antonio Berroa, escribano real, expresando el Cura Beneficiado que sobre sus casas reconoce sesenta pesos de principal del legado que dejó Sebastián Patiño para una misa por las ánimas.

·      Y dicho Cura presentó un testimonio del remate que se celebró en cantidad de 300 pesos de la casa que dejo don Juan Pedraza Rodríguez para un legado de 500 pesos, a fin de que con sus réditos se celebre la novena de los Dolores de Nuestra Señora en la Iglesia de este Santuario, diciendo que en el concurso formado a los bienes mortuorios del bachiller don Simón Mateo Saucedo, albacea de dicho Pedraza, consiguió el cobro de los doscientos pesos restantes al cumplimiento de los citados quinientos, a los cuales agregó cincuenta más, que también cobró para aumentar este principal, y que dichos 250 pesos se hallan impuestos sobre la casa de la morada de don Pedro Cortés, en el barrio del convento de Santo Domingo de la expresada ciudad, quien otorgó //[17] escritura de obligación, que no exhibe por hallarse en poder del Promotor fiscal de este Obispado, en vista de lo cual mandó Su Señoría Ilustrísima se observe y guarde lo que tiene prevenido en el auto de aprobación de las cuentas de fábrica y lo que asimismo mandó en su auto general de visita el Ilustrísimo Señor don Francisco de San Buenaventura Martínez de Tejada, de buena memoria, Obispo que fue de esta Diócesis, en cuanto al inventario de los citados legados y que de ellos se ponga razón en una tabla en la Sacristía de esta Iglesia parroquial, con expresión de las obligaciones y cargas de uno de dichos legados.

 

Visita de alhajas y ornamentos de la parroquia [al margen]

Se procedió a la visita del camarín de Nuestra Señora y su Sacristía, y habiéndose reconocido las alhajas y ornamentos pertenecientes a la misma Iglesia parroquial, según el orden del inventario que ma–//–[18]nifestó el relacionado Cura, mandó Su Señoría Ilustrísima que se componga y remiende la muceta con que sale el Ministro que lleva el viático a los enfermos, y asimismo el ornamento negro, por haberse advertido estar muy maltratados, y lo demás en conveniente forma.

 

Alhajas y ornamentos del Santuario [al margen]

Asimismo, se visitaron las alhajas y ornamentos que manifestó el bachiller don Manuel Curras, pertenecientes al Santuario de Nuestra Señora, los cuales se hallaron en conveniente forma, y no se reconocieron los demás que se contienen en el inventario por hallarse en el Convento de Santa Teresa de Jesús de la ciudad de Guadalajara, para su mejor custodia, aseo y limpieza.

 

Alhajas y ornamentos de los pueblos [al margen]

Juntamente se visitaron las alhajas, ornamentos, ropa blanca y demás paramentos de las iglesias de los pueblos de Atemajac, Zoquipan,[19] Mezquitán, Ixcatlán, Jocotlán, [San Juan de] Ocotán,[20] San Esteban, Tesistlán, Santa Ana [Tepetitlán] y Nestipac, sujetos a esta cabecera, y se halló tener cada uno los necesarios para celebrar con decencia el Santo Sacrificio de la Misa. //[21]

El bachiller don Ignacio Martínez de Alarcón, clérigo presbítero Capellán del Santuario de Nuestra Señora, presentó sus licencias de decir misa y asimismo de confesar generalmente hombres y mujeres, las cuales se hallan corrientes en su término y en conveniente forma. Presentó un título de Capellán propietario de la capellanía servidora que fundó el bachiller don Juan Antonio Ximénez y Samuno, de 6 mil pesos de principal y 300 de renta anual, que reconoce don José Lorenzo de Corta, con la especial hipoteca de su oficio de ensayador y balanzario, y la fianza de don Francisco Brena, don Pedro Caballero Galán y don Gregorio Pérez; con obligación el capellán de servir en este Santuario residiendo a pie en él, para solicitar el mejor adorno y decencia de la Santísima Señora y cuidar de sus alhajas y demás bienes, dedicándose a confesar, y con las demás obligaciones y que en su título se expresan, con las cuales juró in verbo sacerdotis tacto pectore[22] haber cumplido exactamente. //[23]

Presentó otros dos títulos de Capellán propietario de dos ramos de capellanía, el uno que fundó doña Catarina de la Mota Padilla, viuda, vecina del pueblo de Nuestra Señora de San Juan, de 2 mil pesos de principal, impuestos sobre la hacienda de Chile y Camichines que en jurisdicción de Jalostotitlán poseyó don Juan de Alcalá y Mendoza, con obligación de veinte y cinco misas; y el otro de la que fundó Tomé Lope de la Cruz, de 7 mil pesos de principal, que sólo ha quedado en 3 535 pesos, impuestos los 2 mil sobre hacienda nombrada los Horinos, en jurisdicción de Lagos, 875 pesos que se dieron a réditos a don Juan Antonio Martínez de los Ríos, 500 sobre casas de la ciudad de Guadalajara, que fueron de don Pedro del Castillo y Pesquera, y los otros 200 sobre casas en la ciudad de Guadalajara pertenecientes a don José de Araiza, con obligación de las misas que corresponden a la renta, jurando dicho bachiller haber cumplido con las obligaciones respectivas a uno y otro ramo, con cuya vista dio Su Señoría Ilustrísima por visitados los dichos títulos, y mandó se le devolviesen originales para //[24] su resguardo.

Los bachilleres don José Mariano Navarro Gaitán y don José Rafael Valdivia, Tenientes de Cura de esta feligresía, presentaron sus licencias de decir misas y asimismo de predicar, confesar y administrar sacramentos en lengua castellana, y por haberse cumplido el término por que se concedieron a dicho bachiller Valdivia, mandó Su Señoría Ilustrísima se le refrendasen para que use de ellas según su expresión y forma por el tiempo de ocho meses y sin perjuicio del derecho parroquial; como también las de decir misa en las capillas de las haciendas nombradas Santa María Magdalena y San Antonio del Salto, las cuales mandó que usasen de ellas según su expresión y forma, y con las mismas condiciones que constan refrendadas por Su Señoría Ilustrísima; no se presentó la de la hacienda nombrada Santa Lucia, por haber expresado el Cura que don Juan Leñero, dueño de dicha hacienda, ofreció presentarla en la Secretaría de Cá–//–[25]mara y Gobierno de la Ciudad de Guadalajara.

 

Sobre la cofradía de Nuestra Señora de la Expectación [al margen]

Y por cuanto está Su Señoría Ilustrísima informado de que, habiendo en esta Iglesia parroquial y Santuario una cofradía de Nuestra Señora con la advocación y título de su Expectación, a cuyos cofrades están concedidas perpetuamente muchas gracias e indulgencias por la Santidad del Señor Inocencio undécimo en su Breve de 31 de agosto de 1678, y que por falta de fondos con que celebrar sus funciones se halla decaída y casi al extinguirse; para que no suceda y que los fieles no se priven de tanto beneficio espiritual relevó Su Señoría Ilustrísima por ahora y entre tanto hay fondos bastantes de la celebración prevenida en las constituciones, y de todo gasto para que el producto de sus asientos se junte y guarde en parte de fondos, y que con sólo el ingreso en esta cofradía y práctica de las diligencias prevenidas en el relacionado Breve, consigan las indulgencias que en él se conceden, lo cual se haga saber en el pulpito y por medio de papeles manuscritos en las puertas de la Iglesia parroquial, solicitando el bien de los que quisieren asentarse, cuyas limosnas se guarden por el referido //[26] Cura, con toda cuenta y razón; aplicando Su Señoría Ilustrísima para fondos de esta cofradía las treinta reses que hay existentes al cuidado del Cura, pertenecientes a Nuestra Señora, con encargo de que se procure su mayor aumento, y que habiendo competentes fondos de cuenta para providenciar lo que convenga.

Otrosí, aplicó Su Señoría Ilustrísima dos casullas usadas del Santuario de Nuestra Señora, la una blanca de tela y la otra encarnada de raso de China, para el uso de la Parroquia, con calidad de que de las viejas que tiene el Curato se den dos casullas blancas a las Iglesias de los pueblos de Ixcatlán y Jocotlán, por cuanto en la visita que se hizo de dichos ornamentos se ha reconocido estar necesitadas de ellas.

Últimamente mandó Su Señoría Ilustrísima se observe lo mandado en los autos de visita de los Ilustrísimos Señores Obispos sus predecesores en cuanto a que se administre el viático en el rural a los enfermos de fuera de la cabecera, sin que sea necesario que lo pidan //[27] cuando llamaren; y en cuanto a la enseñanza de la Doctrina Cristiana a los indezuelos e indezuelas por medio del Fiscal todos los días. Y que no se permita a ningún eclesiástico decir misa en enramada, y que así el actual Vicario como sus sucesores cobren y reanuden la limosna correspondiente a las misas de cuarta funeral de testamentos, las cuales por derecho tocan a la Sagrada Mitra, y la importancia de lo que colectare la remita oportunamente a manos de Su Señoría Ilustrísima.

Últimamente se procedió a la visita particular y secreta en la forma regular y acostumbrada, y de su resulta tomó Su Señoría Ilustrísima las providencias que le parecieron convenientes.

En los días que Su Señoría Ilustrísima se ha mantenido en este Curato, celebró el Santo Sacramento de la confirmación y lo confirió a _____ personas, que se asentaron en el libro de confirmaciones de este Curato, el cual firmado de Su Señoría Ilustrísima //[28] se entregó al citado Cura para que lo guarde con los demás de su administración. Y para la observancia y cumplimiento de lo contenido en este auto, mandó Su Señoría Ilustrísima se le notifique al Cura y se ponga testimonio de él en el libro de Bautismos. Y así lo proveyó, mandó y firmó. (Testado =desposorios= libre requerimiento =no v[al]e)

 

Fray Antonio, Obispo de Guadalajara [rúbrica]

 

En el pueblo de Zapopan a primero de mayo de mil setecientos setenta y siete años. Notifiqué el auto antecedente al bachiller don José Antonio Bravo de Gamboa, y entendido de su contenido dijo lo oye, obedece y que cumplirá con lo que se le manda, y lo firmó, de que doy fe.

 

Bachiller Josep Antonio de Gamboa [rúbrica]

 



[1] Archivo Histórico de la Arquidiócesis de Guadalajara, Sección Gobierno, Serie Visitas Pastorales, ff. 347r–363r, aquí separadas con //; caja 6. La versión paleográfica es del licenciado en Historia Antonio Gutiérrez Cruz.

[2] Zapopan (del náhuatl Tzapopan, ‘lugar de zapotes’), es hoy un municipio de Jalisco y su cabecera, en la región centro del estado y fundido con la capital del estado. Tiene una población de un millón y medio de habitantes, siendo el séptimo más poblado de México. Por otro lado, es también el municipio con mayor PIB per cápita de Jalisco y uno de los 50 municipios con mayor PIB per cápita en México. Su fundación es paralela a Guadalajara (1542).

[3] f 347r

[4] f 347v

[5]  f 348r

[6] f 348v

[7] f 349r

[8] f 349v

[9] f 350r

[10] f 350v

[11] f 351r

[12] f 351v

[13] f 352r

[14] f 352v

[15] f 353r

[16] f 353v

[17] f 354r

[18] F 354v

[19] El original dice Zoquipa

[20] El original dice Ocotlán

[21] f 355r

[22] “Bajo su palabra de sacerdote, tocándose el pecho”

[23] f 355v

 

[24] f 356r

[25] f 356v

[26] f 357r

[27] f 357v

[28] f 358r





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